Page 18 - Redes, Estado, Empresa y Telecomunicaciones en Puerto Rico

mbio administrativo por las tres normas de in-
tegración de política pública, competencia técnica y Gerencia del Estado Libre Asociado de Puerto
y ambiente de innovación, es obligado concluir
que se experimentó un gran avance”.
Estudiar y comprender esas experiencias
—proyectos y realizaciones, éxitos y también
fracasos— es importante para poder auscultar
bien las realidades actuales y las posibilidades
futuras, como supieron hacerlo las generacio-
nes anteriores. Por eso es de lamentar que haya
pocos testimonios directos de las personas y
de las instituciones que realizaron estas haza-
ñas. Algunas figuras de las áreas de la cultura y
de la educación dejaron constancia de su labor:
Ricardo Alegría con El Instituto de Cultura Puer-
torriqueña, 1955-1973: 18 años contribuyendo a
fortalecer nuestra conciencia nacional (1978);
Jaime Benítez con Junto a la Torre. Jornadas de
un programa universitario, 1942-1962 (1962); Ar-
turo Morales Carrión con Testimonios de una
gestión universitaria, 1973-1977 (1978).
El Banco Gubernamental de Fomento aprove-
chó su cincuentenario en 1992 para publicar una
historia institucional: Innovación, experiencia
y solidez para Puerto Rico / Strength, Perfor-
mance and Innovation for Puerto Rico (1992). La
Oficina de Presupuesto y Gerencia hizo lo pro-
pio con su Memoria-Informe en conmemoración
MENSAJE DEL GOBERNADOR, HONORABLE ALEJANDRO J. GARCÍA PADILLA 15
del cincuentenario de la Oficina de Presupuesto
Rico (1992), primera y posiblemente todavía única
memoria de una oficina estatal de presupuesto.
Por consiguiente, es doble el motivo para ce-
lebrar: veinte años de labor bien rendida y la
publicación de Redes. Hago mías las acertadas
palabras que cierran el mensaje del presidente
de la Junta:
Redes […] demuestra que el altísimo
perfil de Puerto Rico en el mundo de
las telecomunicaciones realmente no
es nuevo, pues hemos sido líderes y
referentes mundiales desde finales del
siglo XIX. [...] Es a mi juicio esperanzador:
fortalece nuestra fe en la acción
gubernamental responsable y en el poder
de los mercados, cuando su libertad
emana de parámetros jurídicos racionales,
técnicos y justos. Y sobre todo, de cara
al futuro, nos inspira a seguir creyendo
en las posibilidades de las tecnologías
de información y comunicación como
catalizadoras de progreso y desarrollo
humano integral, razón última de toda
gestión pública y de la civilización misma. •