Page 23 - Discursos
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POR RAFAEL HERNÁNDEZ COLÓN
personaje. De carácter fuerte y miras altas, siempre
tenía proyectos que chocaban con el presupuesto o
con los planes de las agencias. Me dio la encomienda
de resolverlos lo cual no era misión fácil. Una vez se
trancaron las negociaciones para la nueva Escuela
Olímpica, pues representaba posponer otras escuelas en
el país por su costo. Le consulte y usted me dijo “lo que te
pida Don Germán hay que ayudarlo, pues sus obras van
a quedarse para siempre”. Don Germán fue a verme y
luego de varias reuniones con la Secretaria de Educación
Awilda Aponte, el Departamento de Educación accedió
a modificar su programa cuando le dije “que no se
enteré Don Germán, pero mis instrucciones son que si
esto llega a Fortaleza van a decidir a favor de todo lo
que él pida, así que es mejor negociar algo razonable
conmigo”. Y así fue, y hoy el Albergue Olímpico que
lleva su nombre, ve sus atardeceres acurrucándose al
lado de su escuela.
Rubens- En la gestas electorales conocimos a
un ser entregado a nuestra luchas y a quien ambos le
tomamos especial cariño. Un día me informaron que
estaba nuevamente hospitalizado. Decidí llamarlo.
Esa misma tarde lo visitó en el Hospital. Y todas las
semanas hasta que partió lo continuó visitando. Cuando
me despedí de él me dijo “Rafael me visitó y esa alegría
nadie me la puede quitar.” Y pienso que hoy él le envía
su abrazo fraternal y su sentida admiración porque
siempre atesoró el valor de su amistad. Esa vivencia, de
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personaje. De carácter fuerte y miras altas, siempre
tenía proyectos que chocaban con el presupuesto o
con los planes de las agencias. Me dio la encomienda
de resolverlos lo cual no era misión fácil. Una vez se
trancaron las negociaciones para la nueva Escuela
Olímpica, pues representaba posponer otras escuelas en
el país por su costo. Le consulte y usted me dijo “lo que te
pida Don Germán hay que ayudarlo, pues sus obras van
a quedarse para siempre”. Don Germán fue a verme y
luego de varias reuniones con la Secretaria de Educación
Awilda Aponte, el Departamento de Educación accedió
a modificar su programa cuando le dije “que no se
enteré Don Germán, pero mis instrucciones son que si
esto llega a Fortaleza van a decidir a favor de todo lo
que él pida, así que es mejor negociar algo razonable
conmigo”. Y así fue, y hoy el Albergue Olímpico que
lleva su nombre, ve sus atardeceres acurrucándose al
lado de su escuela.
Rubens- En la gestas electorales conocimos a
un ser entregado a nuestra luchas y a quien ambos le
tomamos especial cariño. Un día me informaron que
estaba nuevamente hospitalizado. Decidí llamarlo.
Esa misma tarde lo visitó en el Hospital. Y todas las
semanas hasta que partió lo continuó visitando. Cuando
me despedí de él me dijo “Rafael me visitó y esa alegría
nadie me la puede quitar.” Y pienso que hoy él le envía
su abrazo fraternal y su sentida admiración porque
siempre atesoró el valor de su amistad. Esa vivencia, de
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